El cocinero David Yebra cerró su negocio hostelero de Mera y se cambió al paseo marítimo coruñés, donde mantiene la misma apuesta gastronómica pero con algunas novedades como la comida para llevar o el menú del día especial
Yebra Gastrobar, que en los dos últimos años estuvo en la parte de atrás del paseo marítimo de Mera, acaba de abrir en Barrié de la Maza 32, en la zona cero de los temporales del paseo marítimo de Riazor.
«A nivel personal lo llevo mal porque echo de menos Mera y a su gente. A nivel profesional es un proyecto que me pone y creo que lo podemos hacer bien. Llevamos unos días abiertos y casi nadie nos conoce, pero los que vienen salen contentos. Estamos ubicándonos», comenta David Yebra desde el negocio que lleva su apellido. Un local para comer o cenar picando o tomando un plato y siempre con propuestas diferentes, de hecho su plato estrella es toda una declaración de intenciones gastronómicas: alcachofas confitadas con zamburiña, aroma de trufa y emulsión de jengibre. «Tenemos idea de implementar un menú del día o un plato de día que se salga de la oferta habitual porque por aquí hay muchos trabajadores y oficinas. También vamos a apostar por la comida para llevar.
Cambiar de ubicación nos abre nuevos campos», analiza David. Es un cocinero que lleva desde los 19 años acumulando experiencia. Hasta formó parte del equipo que abrió un restaurante libanés de referencia en Madrid.
Enamorado de una mujer de Perillo, le llegó el momento de plasmar todo lo que aprendió por el mundo adelante. «Tengo una mezcla de sitios e intento fusionarlos de una forma coherente con los productos gallegos. Nos está pasando como en Mera, al principio cuesta arrancar, pero cada vez viene más gente», destaca Yebra, el hombre que cruzó la bahía con su gastrobar.
